En la lucha por el trono del color todoterreno por excelencia, el negro ha dejado paso a otros colores que destacan por su versatilidad en el entorno del interiorismo.
Uno de esos colores es el gris, que destaca por sus posibilidades de adaptación a prácticamente cualquier estancia y estilo. En Tiendas On han preparado un catálogo de sofás grises que encajarán a la perfección en todos los ambientes.
En su selección quieren resaltar la vertiente más sobria y contenida del estilo retro, con sofás que se acoplan con facilidad a cualquier otra tendencia.
Los tonos más oscuros de gris son idóneos para hogares con niños o para locales comerciales en los que el uso de estas piezas sea intensivo.
Una tendencia en alza es la de decorar el respaldo con botonadura. Si le sumamos a eso una nota de color, obtendremos un resultado de lo más alegre en nuestro hogar.
Como ya mencionamos en un post anterior, el terciopelo aporta delicadeza y romanticismo. Un mueble grande como un sofá no necesitará de complementos para destacar por sí mismo.
No tenemos por qué renunciar al estilo vintage o clásico. Aquí tenemos un ejemplo de sofá Chester gris que escapa a la habitual tapicería de color marrón o negro.
Muy identificables son los sofás de estilo Mid century. Patas en disposición oblicua, cortas y de respaldo bajo. Un aporte minimalista y muy actual.
También el estilo mid century se deja notar en sofás cama que no renuncian al diseño.
El estilo nórdico sigue siendo un básico en la decoración de interiores. Éstos sofás invitan a quedarse en casa para disfrutar al máximo de su comodidad.
Otros colores se mezclan con el gris para dotar a los sofás de una personalidad especial. El azul es uno de esos ejemplos.
En definitiva, decantarse por un sofá gris nos asegura un mantenimiento mínimo y es una apuesta de largo recorrido en el caso de modificar el estilo de la estancia en la que se ubique. Además, es muy fácil de mezclar con otros colores. Combinar el gris con tonos pastel es una de las tendencias del año, o con muebles de madera clara y metales de acabados en plata o cobre ¡Una sabia elección!
En su selección quieren resaltar la vertiente más sobria y contenida del estilo retro, con sofás que se acoplan con facilidad a cualquier otra tendencia.
Los tonos más oscuros de gris son idóneos para hogares con niños o para locales comerciales en los que el uso de estas piezas sea intensivo.
Una tendencia en alza es la de decorar el respaldo con botonadura. Si le sumamos a eso una nota de color, obtendremos un resultado de lo más alegre en nuestro hogar.
Como ya mencionamos en un post anterior, el terciopelo aporta delicadeza y romanticismo. Un mueble grande como un sofá no necesitará de complementos para destacar por sí mismo.
No tenemos por qué renunciar al estilo vintage o clásico. Aquí tenemos un ejemplo de sofá Chester gris que escapa a la habitual tapicería de color marrón o negro.
Muy identificables son los sofás de estilo Mid century. Patas en disposición oblicua, cortas y de respaldo bajo. Un aporte minimalista y muy actual.
También el estilo mid century se deja notar en sofás cama que no renuncian al diseño.
El estilo nórdico sigue siendo un básico en la decoración de interiores. Éstos sofás invitan a quedarse en casa para disfrutar al máximo de su comodidad.
Otros colores se mezclan con el gris para dotar a los sofás de una personalidad especial. El azul es uno de esos ejemplos.
En definitiva, decantarse por un sofá gris nos asegura un mantenimiento mínimo y es una apuesta de largo recorrido en el caso de modificar el estilo de la estancia en la que se ubique. Además, es muy fácil de mezclar con otros colores. Combinar el gris con tonos pastel es una de las tendencias del año, o con muebles de madera clara y metales de acabados en plata o cobre ¡Una sabia elección!
