Paseando por la céntrica calle de Pozo Amarillo de Salamanca, nos encontramos con un escaparate que llama nuestra atención y nos obliga a pararnos. Abierta desde hace dos años, Pistacho 31 es una boutique de moda exclusiva para mujer de estilo urban chic. 
Con cada cambio de temporada, su propietaria, Teresa Pérez, renueva el aspecto del escaparate. Basándose en las piezas más atrevidas de Tiendas On, logra conjugar las prendas textiles y complementos con el mobiliario de tal forma que el resultado es un marco muy potente que atrapa al visitante visualmente.
Alrededor de los siempre presentes palés de madera, algunos de sus protagonistas han sido la famosa oveja Sheep Green, la butaca Cardenal oro, el sillón Egg Denim o la silla Riff. Todos ellos con un denominador en común; piezas de mobiliario muy versátiles, funcionales y con un cuidado extremo por el diseño.
En el interior de la tienda, la tendencia se mantiene. Las paredes pintadas en color verde pistacho flúor conviven con el papel pintado de hormigón Elements 46530. Esta combinación de colores y texturas potencian el carácter industrial de Pistacho 31.
Podemos encontrarnos a las diferentes colecciones colgadas de unas estructuras metálicas compuestas por cadenas y barras de acero, diseñadas en exclusiva para la boutique, almacenadas en enormes cajoneras metálicas o sobre muebles Barroco Kitsch. 
Esta tienda de moda transmite una energía transgresora, tanto exterior como interiormente, al jugar con los elementos decorativos y las colecciones textiles en un mismo conjunto. Pistacho 31 ha conseguido marcar un estilo muy personal y despuntar estéticamente en la moda salmantina.
Con cada cambio de temporada, su propietaria, Teresa Pérez, renueva el aspecto del escaparate. Basándose en las piezas más atrevidas de Tiendas On, logra conjugar las prendas textiles y complementos con el mobiliario de tal forma que el resultado es un marco muy potente que atrapa al visitante visualmente.
Alrededor de los siempre presentes palés de madera, algunos de sus protagonistas han sido la famosa oveja Sheep Green, la butaca Cardenal oro, el sillón Egg Denim o la silla Riff. Todos ellos con un denominador en común; piezas de mobiliario muy versátiles, funcionales y con un cuidado extremo por el diseño. 
En el interior de la tienda, la tendencia se mantiene. Las paredes pintadas en color verde pistacho flúor conviven con el papel pintado de hormigón Elements 46530. Esta combinación de colores y texturas potencian el carácter industrial de Pistacho 31.
Podemos encontrarnos a las diferentes colecciones colgadas de unas estructuras metálicas compuestas por cadenas y barras de acero, diseñadas en exclusiva para la boutique, almacenadas en enormes cajoneras metálicas o sobre muebles Barroco Kitsch. 
Esta tienda de moda transmite una energía transgresora, tanto exterior como interiormente, al jugar con los elementos decorativos y las colecciones textiles en un mismo conjunto. Pistacho 31 ha conseguido marcar un estilo muy personal y despuntar estéticamente en la moda salmantina.
